En tiempos como las actuales, la capacidad de gestionar el talento en forma ágil, dinámica y flexible, ofrece a las empresas y sus equipos la posibilidad de adaptarse al cambio, mejorar la productividad, ser más competitivos y aspirar a lograr mejores resultados en un mercado caracterizado por la incertidumbre.
La gestión del talento en las empresas constituye un desafío prioritario en tiempos de adaptación y transformación, como el actual.
Estamos atravesando tiempos de profundas transformaciones en los que el desarrollo del talento adquiere un mayor protagonismo, como factor clave de adaptabilidad, productividad y competitividad.